El “Distrito Joven” es una iniciativa del Gobierno de la Ciudad que fue aprobada por la Legislatura en 2018 y abarca cinco sectores de la Costanera Norte de la ciudad, los cuales comienzan en el Parque de la Memoria y finalizan en Costa Salguero, con unos 7 kilómetros de extensión en total, pasando frente al Aeroparque.
La iniciativa del Gobierno se debatió los días 14, 15 y 16 de febrero en Audiencia Pública.
Desde organizaciones sociales y ambientalistas consideran que, con ese proyecto, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, “continúa con la privatización” de la Costanera.
“Una vez más, la ciudadanía porteña está a punto de perder espacio verde y público, pasando por arriba lo establecido en la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires que en el artículo 8 establece que el contorno ribereño debe ser de acceso libre y público. Y del artículo 27 que dispone que deben recuperarse las áreas costeras”, indicaron desde la organización social “El Movimiento”.
Jonatan Baldiviezo, integrante de “El Movimiento” y fundador del Observatorio del Derecho a la Ciudad, sostuvo que el Gobierno porteño sigue “desbocado en su afán de entregar el contorno ribereño para explotaciones privadas” y dijo que “ahora pone en debate su propuesta de privatizar hectáreas de la Costanera Norte. Alrededor de cuatro veces más de lo que privatizó en el predio de Costa Salguero”.
De acuerdo con la Ley 5961 aprobada en 2018, el objetivo es que el “Distrito Joven – Costanera Norte” sea una zona destinada a espacios recreativos, culturales, gastronómicos y de entretenimiento. Los proyectos que se construirán allí fueron seleccionados a través de un “concurso de ideas” convocado por el Gobierno porteño en 2020.
Para dar lugar a esos proyectos, la Ley 5.961 autorizó al Poder Ejecutivo de la Capital Federal a “otorgar en concesión el uso y la explotación de los espacios de dominio público” ubicados en la zona “por un plazo de hasta 10 años”.
Por tratarse de una ley de doble lectura con la correspondiente convocatoria al debate en Audiencia Pública, las conclusiones serán giradas a la Legislatura para ser sometidas a una nueva votación.
El oficialismo tiene mayoría propia por lo que se descuenta la aprobación del proyecto original como ha sucedido siempre en situaciones similares. Como de costumbre, la militancia ambientalista no logra afectar las decisiones inmobiliarias del gobierno de la Ciudad.