La iniciativa facultaba al Poder ejecutivo de la Ciudad a realizar construcciones y concesionar equipamiento en plazas, parques y paseos.
El retiro del proyecto de ley se materializó mediante una nota dirigida a la Comisión de Protección y Uso del Espacio Público que la legisladora preside a fin de que “se archive el proyecto de ley de promoción, defensa y conservación de los espacios verdes públicos de la Ciudad y su utilización sustentable, de mi autoría“. Majdalani ratificó, sin embargo, su interés en el tema “Dejo constancia que no abandono la idea de volver a presentar un proyecto sobre este tema específico” afirmó. Dice estar “convencida que los espacios verdes son componentes básicos del espacio público, indispensables para el desarrollo armónico y equilibrado de la población, tanto en su aspecto psíquico como físico“.
A la presión ejercida por entidades ambientalistas que desembocaron en el retiro del proyecto, la legisladora alude en forma tangencial: “La riqueza del debate, que se dio a partir del tratamiento del proyecto, me ha dado el convencimiento que el presente tema necesita de un análisis más profundo, en donde se incluya los aportes realizados, no solo por los diputados de todas las bancadas y sus asesores, sino por las diversas instituciones que defienden los espacios verdes“.
El enojo de los ambientalistas con Majdalani fue provocado por el artículo 7º del proyecto que reza:
“Se autoriza a la Autoridad de Aplicación a realizar obras de infraestructura y prestación de servicios, por si o por terceros, así como dar en concesión equipamiento, para el mejor aprovechamiento de los visitantes de los espacios verdes públicos de acuerdo a lo determinado por la reglamentación de la presente”.
En realidad el proyecto no era mucho más que eso. En el resto se ocupaba de definir plaza, boulevard, plazoleta, jardín y paseo, sancionar a los paseadores de perros que no cumplan la reglamentación y ordenar la creación de un registro y un mapa de los espacios verdes públicos.
Curiosamente, en los considerandos la legisladora se proponía contribuir al combate contra el calentamiento global con su proyecto: “A nadie escapa que en estos tiempos de recalentamiento global por la pérdida de espacios verdes a mano del hombre, con la inmediata consecuencia de desfavorables cambios climáticos, la preservación de los existentes y la creación de nuevos sitios se han vuelto imprescindibles” afirmaba. Pero, hubiera resultado difícil compatibilizar ese propósito con más construcciones en las menguadas áreas verdes de la Ciudad de Buenos Aires.
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Texto del Proyecto (Expediente N° 173-D-2008) |