La foto de Giovanni Sachetto, registra una escena la noche del 25 de setiembre del 2001, durante el más intenso de todos los siniestros en la Reserva Ecológica de Buenos Aires.
En el predio de 300 hectáreas de acceso libre y gratuito se producen recurrentes incendios que afectan a la flora y la fauna del santuario.
Los incendios en el predio de la Reserva han sido recurrentes a lo largo de los años, afectando a la flora y —sobre todo— a la fauna del parque.
Existen dudas respecto a si han sido producto de descuido, vandalismo o intereses creados. Mientras el descuido y el vandalismo se explican por si mismos, es más difícil entender como podrían operar los intereses creados. Quienes sostienen esta hipótesis, sin embargo, opinan que el valor de 300 hectáreas en el centro de la ciudad de Buenos Aires podría generar incalculables negocios inmobiliarios. Tales intereses —según esa opinión— podrían incentivar el daño para torcer la voluntad de mantener el predio como un parque natural y reserva ecológica pública y gratuita.