El gobierno porteño salió a defender el accionar de la Policía Metropolitana, que reprimió en el hospital Borda a trabajadores, internos, legisladores y periodistas. Las claves de la argumentación política que no exhibe protocolos del operativo ni explica la ausencia de funcionarios en el lugar de los hechos. Denuncian el uso de balas de plomo para defender la demolición del Taller Protegido 19.