Norma Ester Cáceres, una joven parturienta de 29 años internada en el Hospital Argerich dio a luz a una beba el 16 de julio de 2001. Pero a pesar de que no hubo complicaciones durante el parto quedó incapacitada en un 60% por un accidente cerebro vascular provocado por la desatención posterior. Un fallo de la Sala B de la Cámara Civil porteña al que tuvo acceso Télam, condena al Gobierno de la Ciudad a indemnizarla con la suma de $ 181.240.
La sentencia de los jueces Mauricio Mizrahi, Claudio Ramos Feijoó y Jerónimo Sansó abarca daño moral, psíquico, gastos y tratamientos futuros, medicamentos y traslados. La víctima, según las pericias, “presentaba durante el parto y el tiempo inmediato posterior a él un cuadro de hipertensión arterial. Después del nacimiento de su beba, ocurrido a las 5:10, fue dejada durante más de dos horas “y virtualmente sin atención” en una camilla en los pasillos del hospital, pese a que “presentaba intensos dolores de cabeza, vómitos y convulsiones”.
“Ya en la habitación, y debido a la hipertensión arterial que por esos momentos padecía, se desvanece a las 21:45 horas… a pesar de lo cual es recién después de las 23 horas de ese día cuando se dispone su traslado a la unidad de terapia intensiva”, señalaron los camaristas.
El Gobierno de la Ciudad arguyó durante las actuaciones que no se habría acreditado la “relación de causa a efecto entre la asistencia médica brindada a la mujer y los daños sufridos”. El argumento fue desestimado por los jueces y el fallo condenatorio en primera instancia fue así confirmado por la Cámara, por lo cual la sentencia queda firme.
La misma Sala B de la Cámara Civil porteña condenó el año pasado al Gobierno de la Ciudad a indemnizar a una mujer quien quedó infertil debido a una infección de útero tras dar a luz por cesárea en el Sanatorio Julio Méndez.
Fuentes: Infobae, Clarín, La Nación y ADN Ciudad.
