LA PASTA BASE DE COCAÍNA HACE ESTRAGOS ENTRE CHICOS POBRES
Tras una presentación del defensor de Menores, Gustavo Moreno, la semana pasada para que la Justicia intimara al gobierno porteño a presentar un plan de atención de adictos al paco, se anunció un programa oficial con participación de cuatro ministerios, en una conferencia de prensa que se llevó a cabo en la sede del gobierno porteño el miércoles 20.
El ministerio de Salud, tendrá a su cargo el tratamiento de los adictos en tanto Educación, Gobierno y Derechos Humanos y Sociales acompañarán las denuncias judiciales contra los laboratorios donde se produce la droga. Las “cocinas” de cocaína funcionan en los barrios más pobres de la ciudad.
La droga es consumida especialmente por chicos y jóvenes desde los 8 o 9 años, en los sectores más pobres y excluidos.
Ya hay casos de deserción en algunas escuelas del sur de la ciudad atribuibles al consumo del paco. Según el ministro de Educación porteño, Alberto Sileoni, el consumo está generando altos índices de deserción escolar, sobre todo en la zona sur. “El deterioro físico y mental es tan grave que estos chicos son expulsados del sistema educativo” dijo Sileoni.
Presentación de denuncias
“Vamos a recibir las denuncias y acompañar a los denunciantes ante la Cámara Federal, para que el sistema penal tenga una visión integral y no fragmentada del problema –dijo el ministro de Gobierno, Diego Gorgal. El apoyo ofical a los denunciantes para recurrir por vía directa a la instancia federal se basa en la desconfianza en la policía que suele proteger actividades mafiosas.
En el ámbito del ministerio de Derechos Humanos se están realizando encuentros comunitarios con grupos de madres para luchar contra el paco. El trabajo comunitario tiene por objeto no sólo la contención de los adictos sino también alentar a la gente a denunciar las “cocinas” de cocaína. Gabriela Cerruti dijo que el Ministerio se presentará como querellante para dar curso a las denuncias que reciban.
En ese sentido el jefe de Gobierno anunció, además, que se está trabajando en un programa de protección de testigos. “Estamos ante uno de los fenómenos más siniestros y más preocupantes de los últimos tiempos. Y los poderes públicos y la sociedad en conjunto tenemos que trabajar ante el crecimiento geométrico y exponencial de la producción y el consumo del “paco”“, afirmó Telerman, durante la presentación.
El proyecto en la Legislatura
El programa anunciado por el jefe de Gobierno fue presentado el martes en la Legislatura por Cerruti. Se denomina Plan de Atención Integral sobre Consumo y Dependencia de PBC (pasta base de cocaína). El presupuesto para el tratamiento de adicciones es de 97 millones de pesos, pero la Legislatura podrá reasignar partidas. Si hay consenso, el proyecto podría ser tratado en las sesiones extraordinarias que se inician en los próximos días.
En el ámbito legislativo existen iniciativas de los bloques del ARI, Compromiso para el Cambio y la izquierda que desde hace un año vienen llamando la atención sobre el tema y proponiendo planes de acción públicos.
Como parte de la iniciativa se anunció la creación de un centro de internación especializado, en un edificio de la avenida Independencia al 900, donde funcionó la Clínica Dusaut. “El predio tiene cinco plantas, y en marzo empezarán a funcionar la planta baja y el primer piso, donde habrá 10 camas operativas para atender adictos al paco“, dijo De Micheli.
La iniciativa oficial también contempla la incorporación de equipos especializados en la atención integral de adictos en los Centros de Atención Primaria de la Salud (Cesac), especialmente los ubicados en zonas críticas y la extensión de los horarios de atención. Se crearán también centros de emergencia social para consumidores, que funcionarán en cinco regiones sanitarias del sur de la Ciudad, con atención permanente. Habrá también especialistas en guardias toxicológicas permanentes en tres hospitales: el Pena, el Piñero y el Ramos Mejía.