Tal como se viene haciendo en los últimos años se realizó un censo durante la noche de ayer para determinar el número de personas sin hogar, que duermen en la calle. En esta oportunidad intervinieron 21 equipos del área de Derechos humanos y Sociales del GCBA que recorrieron las calles de Buenos Aires relevando, por simple conteo, el número de personas en esa situación.
El aumento detectado dio lugar a acusaciones de un funcionario de Telerman contra la ex ministra de Derechos Sociales, Gabriela Cerruti. En declaraciones al matutino La Nación, Oscar Feito afirmó que la ex funcionaria es la responsable del aumento porque “en los últimos meses de su gestión hubo descuidos en la tarea … y eso repercutió en aspectos como éste. Por eso, Telerman decidió alejarla del gabinete”,
La ex ministra aseguró en cambio que el “crecimiento alarmante” de las cifras es producto del “recorte presupuestario” a los programas de atención social y de la “reducción de recursos” por parte del gobierno a los albergues públicos.
Como quiera que sea la metodología del “censo” es muy imperfecta como para sacar conclusiones, al punto que no se pudo determinar el sexo de 158 personas que dormían cubiertas con mantas cuando se hizo la recorrida.
Tampoco hay datos que arrojen luz sobre las relaciones familiares. El censo detectó además otros 747 hombres y 124 mujeres, elevando la cifra a un total de 1029, contra 793 del 2006. Pero nada dice acerca de las relaciones de parentesco. ¿Cuántas familias enteras se encontraron? Es un hecho sabido que la comparativamente exigua cantidad de mujeres que están en situación de calle se debe al mayor peligro que representa para ellas, razón por la cual aceptan soluciones institucionales como los albergues. Las 124 personas del sexo femenino encontradas ¿están solas, con sus parejas, con sus hijos?
Los barrios céntricos concentraron al grueso de los censados repartidos entre el centro propiamente dicho y los barrios de Monserrat, Congreso, Once y San Cristóbal.
Según los expertos, la distribución geográfica de las personas que viven en la calle parece estar determinada por la abundancia o escasez de recursos de subsistencia, por “los circuitos del rebusque”: comedores comunitarios, establecimientos gastronómicos en los que recogen sobras y lugares donde pueden ganarse algunas monedas estacionando autos o mendigando, en algunos casos. Las recovas, como las de las avenidas Leandro Alem y Paseo Colón, el Cabildo, el Ministerio de Acciòn Social, etc. son lugares con mayor demanda por la relativa protecciòn que ofrecen.
Más allá de estos datos observables queda flotando la pregunta central: ¿Por qué? ¿Cuáles son la causas que arrojan a la gente a la situación extrema de sobrevivir en la calle? “Muchos padecen la crisis habitacional y son el resabio de la explosión de desalojos que se dieron en la Ciudad en el último año”, dijo a Clarín Gabriela Groba, de la Subsecretaría de Promoción e Integración Social.
Pero, ¿cuántos?. También se especula que habría un incremento de personas que vienen del conurbano para instalarse en los barrios céntricos de la Ciudad. En uno y otro caso se trata de meras opiniones. Un recuento nocturno no resuelve los interrogantes planteados, hacen falta estudios serios.