La firma estatal italiana Enel había anunciado la puesta en venta de Edesur, la distribuidora de energía eléctrica de la zona sur del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), junto con otros activos que posee en la Argentina, en el marco del plan de desinversión a nivel mundial anunciado por la compañía.
Así lo informó en noviembre último mediante un comunicado remitido a la Comisión Nacional de Valores (CNV) y a Bolsas y Mercados Argentinos (ByMA), “a fin de confirmar que la sociedad controlante Enel SpA ha presentado su plan estratégico para el periodo 2023-2025”.
Enel controla Edesur tras adquirir en 2008 la mayoría accionaria de la española Endesa, que era concesionaria de la distribuidora eléctrica argentina, y también heredó las centrales térmicas Costanera y Dock Sud, y la hidroeléctrica El Chocón, cuya concesión vence el año próximo y debería regresar a manos del Estado que deberá definir su futuro manejo.
La venta de la central Costanera se cerró ahora por 102 millones de dólares y el comprador fue Central Puerto, que tiene entre sus principales accionistas a Guillermo Reca, la familia Miguens-Bemberg y Eduardo Escassany.
Al tomar posesión de Central Costanera, Central Puerto sumará una potencia instalada de 2305 MW -a sus ya 4809 MW- y así aportará un total superior a los 7.100 MW al Sistema Argentino de Interconexión (SADI). Tras el cierre de la operación, se produjo la designación de Osvaldo Reca como nuevo presidente de Central Costanera.