En el marco del Día del Animal, 200 esculturas de yaguaretés se exhibieron en la plaza San Martín, en el barrio porteño de Retiro, para concientizar sobre el peligro de extinción en que se encuentra este felino sudamericano. La actividad fue organizada por el Zoológico de Buenos Aires, el Banco de Bosques y las denominadas “Escuelas Verdes”.
Los organizadores explicaron que se decidió exponer 200 esculturas porque esa es la cantidad de ejemplares que se estima quedan en Argentina, distribuidos en las provincias de Chaco, Formosa, Jujuy, Misiones, Salta y Santiago del Estero.
Las esculturas, que representaban a machos, hembras y cachorros en tamaño real, fueron realizadas por el artista plástico Javier Goldschtein junto a 350 voluntarios en la antigua felinera del Zoológico de Buenos Aires.
Con la venta de las obras se comprará un dron para detectar la actividad de caza furtiva en El Impenetrable chaqueño, donde funciona un campamento base para disuadir la presencia de cazadores y traficantes de fauna.
Por su parte, el director de la ONG Banco de Bosques, Emiliano Ezcurra, comentó a Télam que el objetivo fue evidenciar la situación crítica de “nuestro único rugidor” a través de “un golpe creativo”.
“Salvar al yaguareté es fácil y barato”, agregó Ezcurra, y dijo que que es necesario “colocar reductores de velocidad en los lugares en los que se atropellan yaguaretés en Misiones, generar más áreas protegidas, más control de caza y apoyar los proyectos de reitroducción”.
A mediados de abril la entidad ambientalista Conservation Trust Land dio inicio al proyecto de reintroducción del yaguareté en Corrientes, provincia de la que desapareció hace 60 años. El 15 de abril trasladaron a la Reserva Natural Iberá una hembra de yaguareté a la que se le dio el nombre “Tobuna”; allí se espera recibir otra hembra y dos machos destinados a la reproducción de la especie.
El yaguareté es el felino más grande de América y el tercero a escala mundial, después del tigre de bengala y el león. Hasta principios del siglo XX tenía una distribución muy amplia: habitaba desde el sur de Estados Unidos hasta la Patagonia argentina; hoy, solamente ocupa entre un 10 y un 15 por ciento de aquella distribución original.
La pérdida de su ambiente natural por la deforestación, los conflictos con animales domesticados y su caza ilegal son las principales amenazas.