Hasta un millón de especies de plantas y animales pueden extinguirse dentro de algunas décadas por las actividades humanas, afirma el más amplio informe publicado hasta ahora sobre el estado global de los ecosistemas.
Sin acciones drásticas para conservar los hábitats la tasa de especies en extinción –en la actualidad diez a cientos de veces mayor que el promedio a lo largo de los últimos diez millones años – sólo aumentará, dice el análisis.
Los hallazgos provienen de un estudio respaldado por las Naciones Unidas llamado “Servicios Internacionales de Plataforma de Ciencia y Política sobre Biodiversidad y Ecosistemas” (IPBES, en inglés)
De acuerdo al informe las actividades agrícolas han tenido el mayor impacto sobre los ecosistemas de los cuales depende la gente para alimentos, agua potable y un clima estable. La pérdida de especies y hábitats plantea un riesgo a la vida en la tierra tanto como el cambio climático.
El análisis desgrana hallazgos de alrededor de 15000 estudios gubernamentales integrando información de las ciencias naturales y sociales, poblaciones indígenas y comunidades de agricultura tradicional. Es el más importante informe internacional sobre biodiversidad.
Representantes de 132 gobiernos se reunieron la semana pasada en París para finalizar y aprobar el informe. “La biodiversidad debería estar al tope de la agenda global sobre el cambio climático dijo Anne Larigauderie, secretaria ejecutiva del IPBES, en la conferencia de prensa en París. “Ya no podemos decir que no sabíamos” afirmó.
“Nunca habíamos tenido un informe unificado de los gobiernos del mundo que sin ambages deja claramente expresada la crisis que estamos enfrentando por la vida en la tierra” dijo Thomas Brooks científico jefe en la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, en Gland, Suiza, quien ayudó a editar el análisis sobre biodiversidad. “Eso es realmente la novedad clave que estamos viendo aquí” afirmó.
Sin cambios transformativos de la economía mundial social y política que enfrente la crisis el IPBES proyecta enormes pérdidas de biodiversidad que continuarán hasta 2050 y más allá.
“Estamos erosionando los mismos cimientos de nuestra economía, modo de vida, seguridad alimentaria y calidad sanitaria en todo el mundo” dijo el director Robert Watson, un químico atmosférico en la universidad de East Anglia en Norwich, Reino Unido.
Fuente: nature.com