El Comité del Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) se encuentra sesionando desde el pasado 10 de septiembre en su 45° Convención, en la ciudad de Riad, Arabia Saudita, donde se examinarán un total de 50 nuevas nominaciones, de las cuales 34 son de orden cultural, nueve natural, dos mixtas y cinco son modificaciones significativas en los límites, se informó oficialmente.
“El mejor reflejo del trabajo desarrollado por la Argentina lo constituyen los 11 sitios culturales y naturales inscriptos en el país, así como una lista tentativa nutrida, representativa, actualizada periódicamente, como demostración del compromiso de nuestro país con la conservación y la preservación del patrimonio”, sostuvo la embajadora de la Delegación Permanente de la Argentina ante la Unesco, Marcela Losardo.
De esos 11 bienes inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial, cinco de ellos son de carácter natural -como los Parques Nacionales Iguazú y Los Glaciares- y los otros seis de índole cultural como la Quebrada de Humahuaca, las Misiones Jesuíticas de los Guaraníes o La Cueva de las Manos, entre otros.
Respecto de la candidatura del Museo ESMA, Losardo subrayó que “el patrimonio mundial también se reconoce como vehículo privilegiado de la política de derechos humanos del Estado argentino, que en esta conferencia ha presentado la candidatura de un sitio de memoria emblemático de la historia reciente de nuestro país”.
El largo camino recorrido desde 2015, cuando el Estado argentino inició las gestiones ante la Unesco y en 2017 informó al Centro de Patrimonio Mundial que el Museo ESMA había sido inscripto en su lista tentativa, podría tener el miércoles, según estimó la Secretaría de Derechos Humanos argentina, una resolución en la 45° Convención del Comité.