Instantánea del Parque tomada hoy 14 de noviembre de 2008
El Parque de Flora Nativa Benito Quinquela Martín en Irala 200 al 700 del Barrio de la Boca fue el resultado de una movilización vecinal que culminó con la primera ley por Iniciativa Popular de la Ciudad en alcanzar la etapa de Promoción (17.271 adhesiones); el primero diseñado con la participación de los vecinos mediante el programa Diseño Participativo del Paisaje, para un nuevo espacio público; el primero en la Ciudad de flora nativa y el primer parque público del barrio de La Boca. Los vecinos acusan a la actual gestión de Espacios verdes de “inoperancia, improductividad y destrucción” ante la falta de mantenimiento adecuado.
En diálogo con La Urdimbre, Silvana Canziani sostiene: “La inoperancia, improductividad y nivel de destrucción que acarrea la actual gestión de Espacios Verdes no tiene limites. La capacidad intelectual de los funcionarios a cargo no les alcanza para prever que si arreglan ( y para ello secan) el estanque que provee el riego, deben regar con otro sistema, llámese manguera o camión cisterna”.
Toma similar realizada el 1 de noviembre de 2006
Silvana tuvo una actuación destaca en todo el proceso que culminó con la creación del parque. Por eso, experimenta con mayor intensidad la falta de mantenimiento que amenaza la supervivencia de los ejemplares de flora nativa plantados en 2006. “El calor y la ausencia de lluvia, pero por sobre todo el desprecio de estos funcionarios ungidos por su promesa de eficiencia, han convertido jóvenes plantas y el césped de nuestro parque en especies agonizantes”, afirma, al tiempo que no entiende la falta de respuesta de las autoridad ante la preocupación de los vecinos.
“Así nos va con reclamos un poco mas complejos –agrega– como ordenar la seguridad en garitas, contar con coordinadores de actividades, pleno funcionamiento de las instalaciones y …demasiados etcéteras. Espero que a la brevedad podamos contar con gente idónea para gestionar este patrimonio público que se esta deteriorando por inoperancia” concluye.