La marcha, que comenzó en el Ministerio de Hacienda y se dirigió hacia la Legislatura Porteña, tuvo entre sus principales consignas la defensa del salario, el aumento de las asignaciones familiares y la exigencia para declarar la Emergencia Educativa, Sanitaria y Alimentaria en la Ciudad.
La actividad fue convocada en unidad por la Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro (AGTSyP), la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de la Ciudad de Buenos Aires, la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), el Sindicato Argentino de Docentes Privados, el Sindicato de Trabajadores Judiciales (SITRAJU) y Unión de Trabajadores de la Educación (UTE).
