La problemática es importante en la ciudad de Buenos Aires donde trabajan como cartoneros más de cuatro mil niños, niñas y adolescentes. Ciento siete mil menores cumplen tareas laborales en las zonas del Gran Buenos Aires, un 30% en la calle, según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Agencia Rodolfo Walsh —Según el estudio, dado a conocer hoy, en Buenos Aires, los niños comienzan a trabajar entre los 9 y 10 años, y las niñas realizan el trabajo doméstico y familiar, al igual que las pequeñas cartoneras que reparten sus horas entre la recuperación de residuos y las tareas del hogar.
La problemática es importante en la ciudad de Buenos Aires donde trabajan unas 8762 personas en la recuperación de materiales reciclables; de esta cifra, 4223 corresponden a niños, niñas y adolescentes. Así lo precisa un informe sobre trabajo infantil en la recuperación y reciclaje de residuos elaborado por la Organización Internacional de las Migraciones y Unicef.
Al respecto, en el Consejo Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia observan la situación como “un fenómeno multidimensional. Entre sus causas surge un entramado de factores de carácter económico, social y cultural, así como de salud, de organización y dinámica familiar”.
El mismo informe hace hincapié en lo que sucede en Capital Federal y señala que “la situación de calle en esta ciudad se está trabajando de manera focalizada, cuando lo que se necesita es articular con la provincia de Buenos Aires una política de atención metropolitana que frene la exclusión social de estos chicos y chicas sobre quienes, además, creció el maltrato policial desde la sanción del Código Contravencional”, explica el abogado Gustavo Gallo, especialista en temas de infancia.
El debate no se limita solamente a las cifras y los porcentajes. Por esta razón, el Senado nacional votaría antes de fin de año un proyecto de ley que eleva a 15 años la edad mínima para firmar un contrato laboral.
Al igual que otros países de la región, la Argentina solicitó cláusulas de excepción ante los organismos internacionales para poder mantener el piso mínimo laboral en los 14 años, cuando la Organización Internacional del Trabajo (OIT) recomienda a sus estados miembros que la edad mínima para iniciar una relación laboral deberían ser los 16 años.