Primero fue una pierna del hombre semidesnudo en el 2009, luego perdería la otra y una mano. Seguirían más tarde otros brazos, piernas y cabezas del notable grupo escultórico, en una sangría que no parece tener fin.
El monumento a España es la obra cumbre del escultor italo argentino Arturo Dresco (1875-1961). Sobre pedestales de mármol se yerguen 29 figuras individuales. Algunas, en el frente, secundan a Colón postrado ante a la reina Isabel, la Católica.
Fue encargada al artista por la Comisión del Centenario, en 1910. Su base es un gran basamento de granito rojo con un importante altorrelieve formado por una serie de figuras que representan a todos quienes tuvieron que ver con la conquista y la colonización española, principalmente en la región del actual territorio argentino.
Conquistadores, sacerdotes y virreyes completan el grupo escultórico en la parte posterior y sobre ambos laterales. El monumento se erigió en 1937 en la Avda. España, en la Costanera Sur, como homenaje de la Nación Argentina a la “madre Patria”. Pedro de Mendoza y Juan de Garay comparten el grupo con personajes menos conspicuos o simplemente anónimos, como el primer vandalizado.
Ahora en la Plazoleta donde se encuentra el monumento, están a la vista las extremidades mutiladas del resto de los personajes. Entre ellos Núñez Cabeza de Vaca, Domingo Martínez de Irala, Juan José de Vértiz y Salcedo, Pedro de Cevallos, Francisco Solano y Hernandarias de Saavedra, Sacerdote Fernández y Baltasar Hidalgo de Cisneros.
Además el monumento constaba de una placa de bronce, también desaparecida, de la Asociación Patriótica Española, con los nombres grabados de los españoles participantes en la conquista y sometimiento del nuevo mundo.