Desde hace 4 años, cientos de familias, organizadas en la Asamblea La Línea H No Es Muda, reclaman por las graves perturbación a sus vidas y por los daños a sus inmuebles generados por la constante vibraciones que generan los coches que circulan por la Línea H del Subte.
La zona más afectada es el sector que se encuentra entre las estaciones Caseros y Parque Patricios, donde la Línea H realiza una curva desde la Av. Jujuy para continuar por debajo de la calle Patagones.
Desde que se inauguraron estas estaciones las vibraciones y ruidos fueron incrementándose hasta llegar a los niveles actuales que resultan insoportables para las familias. Las vibraciones, que balancean las puertas y mueven los marcos de las ventanas, comienzan a las 5 am y terminan alrededor de las 2 pm. Las familias no encuentran descanso ni por las noches.
En el mes de enero las vibraciones bajaron a una intensidad mínima para nuevamente incrementarla a los niveles actuales que son los peores en los últimos 4 años. Por este motivo, las familias están convencidos que el problema tiene solución pero ni Subterráneo de Buenos Aires S.E. (SBASE), ni Metrovías ni el GCBA dan respuesta a las familias por sus reclamos.
Las familias están pidiendo al gobierno que realice una evaluación de este problema acorde a la complejidad y constancia del caso. Exigen que no controle un instante sino las vibraciones durante todo el día y en distintos puntos desde los rieles hasta las habitaciones de las viviendas. Están esperando una respuesta de la Agencia de Protección Ambiental a esta solicitud.
Este Sábado 11 de mayo a las 18:30 hs., las familias están convocando a una nueva asamblea en la esquina de Arriola y Patagones.