Hasta el 22 de julio las asociaciones, organismos de cultura, universidades y otras instituciones podrán postular a reconocidos artistas.
La Secretaría de Cultura de la Nación invita a asociaciones de artistas, críticos, historiadores y académicos, universidades nacionales con carreras de arte, organismos culturales nacionales, provinciales y municipales y museos de artes visuales para postular a artistas vivos, de reconocida trayectoria, mayores de sesenta años para recibir el Premio Nacional a la Trayectoria Artística hasta el 22 de julio.
Cada asociación podrá proponer hasta 3 artistas a través de una inscripción online. Luego, ocho artistas serán seleccionados por un jurado conformado por el Director Ejecutivo y la Directora Artística del Museo Nacional de Bellas Artes, dos especialistas en arte argentino designados por la Secretaría de Gobierno y tres especialistas designados por la Secretaría de Patrimonio Cultural, entre una lista de candidatos que propongan las asociaciones, instituciones, organismos de cultura y universidades.
El Salón Nacional abrió sus puertas el 20 de septiembre de 1911. Como parte del programa político que estimuló su creación, este certamen fomentó el desarrollo artístico nacional y actuó como su regulador, perfilando los cánones estéticos y transmitiendo los valores educativos alentados por el Estado.
Desde entonces, las lógicas de legitimación, consagración y promoción de autores que rigen el Salón han seguido el ritmo de las dinámicas sociales y culturales de cada etapa histórica. Su vigencia, por tanto, reside en la capacidad de expresar el estado de situación del campo artístico en un momento determinado y de señalar a sus grandes referentes.
El año pasado los maestros Carlos Alonso, Delia Cancela, Juan Carlos Distéfano, Noemí Escandell, Norberto Gómez, Roberto Jacoby, Marie Orensanz y Manuela Rasjido hicieron historia en la 107° edición del Salón: se trata de los primeros hombres y mujeres en recibir el Premio a la Trayectoria, un reconocimiento a quienes han contribuido de modo decisivo al arte argentino a través de su labor sostenida, aquella que, en el largo camino que recorren los artistas, construye la cultura visual de un país