Todos a Escena
Hace unos días, después de que Jorge Lanata –perseverante abanderado en “terminar con esto, no importa lo que venga”– se despachara con otro de sus mercenarios ataques –el de las políticas culturales– antes de que se conocieran las solicitadas condenatorias, firmadas por miles de compañeros involucrados en sus execrables “denuncias”, publiqué unas líneas en mi facebook opinando sobre la necesidad de nucleamiento de los trabajadores del quehacer artístico-cultural, de alguna forma que posibilite defender organizadamente al Proyecto de País (no al gobierno o a la presidenta) sobre el cual manifiestan su adhesión, ya que es precisamente allí adonde apuntan esos arteros ataques y no a los “cachets” que cobran por sus actuaciones.En esas líneas hacía yo mención al colectivo Carta Abierta –al que puede sumarse como ejemplo el más reciente de Justicia Legítima– como referencias de ciudadanos de ocupaciones afines que, actuando de consuno, logran resultados superadores de las valorables apreciaciones individuales, sin que ello importe –como lo demuestran los nucleamientos citados– que estén “alineados”, ni con el gobierno ni con la presidenta, sino con defender un sino común, deseado y compartido, también desde la crítica constructiva.
Al conocerse luego los textos de las solicitadas aludidas y la cantidad y calidad de trabajadores de la cultura y las industrias audiovisuales que salieron al cruce de las patéticas miserabilidades del “periodista” dependiente de Clarín, tengo la certeza de que si se lograra conformar otro de esos ámbitos de discusión –en este caso el de las políticas culturales– que se manifieste en conjunto y con regularidad, habremos dado otro paso importantísimo en el empoderamiento de que debemos hacernos cargo todos y cada uno de los sectores de la comunidad nacional y popular de la argentina en aras de alcanzar una democracia plena de participación y representatividad.
Fraternalmente, Oscar Rovito, ex actor.