El proyecto de ley que impulsa el oficialismo para la reforma del Código Contravencional convierte la contravención de ruidos molestos en la vía pública en una contravención de acción pública.
“Quien perturba el descanso o la tranquilidad pública mediante ruidos que por su volumen, reiteración o persistencia excedan la normal tolerancia, será sancionado/a con uno a cinco (5) días de trabajo de utilidad pública o multa de doscientos($ 200) a un mil ($ 1000) pesos”. Además establece mecanismos para efectuar denuncias anónimas. Por último, sustituye la facultad especializada del Ministerio de Ambiente y Espacio Público para medir los niveles de sonoridad permitidos (según la Ley 1540).
“Esta ley afecta profundamente a los artistas itinerantes y los criminaliza al coartarles la capacidad de desarrollar su actividad”, explicó la legisladora Lorena Pokoik y alertó sobre el artículo que le delega el poder de policía a las fuerzas de seguridad para definir qué es un ruido molesto.
“Este proyecto de ley busca estigmatizar, criminalizar y reprimir a los artistas que trabajan promoviendo la cultura de nuestra Ciudad. Este modelo exclusivo que impulsa el Gobierno de la Ciudad, no cierra sin represión y es por esto que promueven el punitivismo como medida primera”, puntualizó la legisladora.
“A principio de 2018, presenté un proyecto para fomentar y proteger la actividad artística en el espacio público y que va en contra del espíritu de la modificación del Código Contravencional que pretende aprobar el oficialismo. Nuestra iniciativa concibe la actividad de los artistas en el espacio público como un valor de la Ciudad y en base a eso busca herramientas para protegerla de las arbitrariedades de las fuerzas de seguridad y terminar de esta manera con la persecución que vienen denunciando hace años los músicos que se desempeñan en la vía pública y subtes”.